Como la gran mayoría, conocí a Cranberries con su himno estrella Zombie, a mediados de los '90; sin embargo, fue el sencillo Animal Instinct el que me despertó la curiosidad por esta banda irlandesa liderada por una carismática Dolores O'Riordan.
Una banda que no se quedó solamente con las rentas de su potente debut, sino que ha seguido siempre a pie de cañón creando canciones de calidad, y que ha sabido controlar los estragos que a otros les causa la fama y el éxito. Tanto es así, que en vez de andar sacando discos recopilatorios con un par de temas inéditos facilones, tras dos décadas de éxito, han sabido aceptar el final de la era Cranberries.
Y así nos quedamos, recordando grandes canciones como Dreams, Ode to my family, Promises, Salvation, You and Me, etc. o el magnífico Linger (mi preferido), un tema lento y elegante que nunca me cansaré de escuchar:
Anoche los ví en Madrid por primera vez: un concierto corto pero muy dinámico, con una Dolores muy volcada con el público y con un directo muy potente. Me marché canturreando sus canciones, sonando en mi cabeza esa voz tan peculiar y ese ritmo tan característico... Los había visto, por fin. Pero me quedé con una sensación de nostalgia, pensando que había sido la primera, pero también la última.
Ya formáis parte de mi vida.
Adiós, Cranberries (foto por tyhwer).
No hay comentarios:
Publicar un comentario